La Cabaña de Pablo González, reconocido por sus dos estrellas Michelin y tres soles Repsol, se ha unido nuevamente con la Escuela de Arte de Murcia para presentar una serie de centros de mesa diseñados por los alumnos del ciclo de Técnicas Escultóricas. Esta iniciativa forma parte del esfuerzo continuo del restaurante por fusionar gastronomía, arte y cultura.
La Escuela de Arte de Murcia, con 90 años de historia, es una institución clave en la vida artística, cultural y educativa de la Región. Uno de sus objetivos principales es que los proyectos desarrollados sean reales, proporcionando a los alumnos un currículum profesional sólido y preparándolos eficazmente para el mercado laboral.
Pablo González Conejero destaca la importancia de trabajar con estudiantes. “Me gusta mucho trabajar con alumnos. Son jóvenes y tienen esa limpieza de mente necesaria para aportar soluciones diferentes. Tenemos todos la obligación de ponernos en valor a través de la gente de la Región y para los alumnos puede ser atractivo esa notoriedad que le podemos dar”, señala.
Miguel Ángel Romera, coordinador de Diseño Industrial, señala que “llevar a cabo este tipo de proyectos facilita la aplicación y asimilación de contenidos y técnicas de una forma dinámica e innovadora que también motiva al alumnado. Además, es una manera de demostrar las múltiples posibilidades laborales de nuestros estudios. Este tipo de proyectos a los alumnos les motiva mucho. Es un motor muy potente para que se impliquen en estos proyectos”.
Amanda López Guillermo, directora de la Escuela de Arte, comenta: “El que referentes regionales, en este caso gastronómicos, confíen en el talento joven y lleven a cabo este tipo de proyectos demuestra la altísima calidad de los estudiantes del centro y son iniciativas muy enriquecedoras. Queremos que el alumno sepa enfrentarse a lo que va a vivir cuando salga de la escuela y el hecho de tener ante sí proyectos reales es muy beneficioso para ellos”.
La presentación de estos centros de mesa marca un nuevo hito en la colaboración entre La Cabaña y la Escuela de Arte de Murcia, subrayando el compromiso de ambas instituciones con la innovación y el desarrollo de nuevas experiencias artísticas y gastronómicas.
Se trata de la segunda colaboración que se realiza, tras la de hace unos meses que tuvo como resultado las piezas en las que el restaurante presentaba los postres. En esa ocasión, la propuesta de los alumnos fue plantear a los clientes un juego basado en los conceptos de agua, fuego y aire a través de piedras de colores que ampliaba la experiencia gastronómica.