Con el objetivo de visibilizar la riqueza gastronómica y turística del interior de la Región, los días 7 y 8 de julio tuvo lugar un enriquecedor press trip a Caravaca de la Cruz y Calasparra, dirigido a profesionales de la comunicación para mostrar el valor de los productos de calidad diferenciada y su papel en el desarrollo rural. La iniciativa estuvo organizada por Integral, dentro del proyecto ‘Murcia Rural’ en colaboración con los ayuntamientos de Caravaca de la Cruz y Calasparra.
El grupo de profesionales estuvo compuesto por Concha Alcántara (directora Élite Murcia, The Gastro Times y Onda Regional de Murcia), Cristina Jover (Agencia Weekend), Natalia Salas (Blog Recetas de Escándalo), Elizabeth Almeida y Sergio Goncharoff (La Guía Go), Águeda Martínez (TV Cehegín), Juan F. Robles (La Verdad), Estefanía García (Exquisita Región de Murcia, 7 TV Región de Murcia y Metropolitan Radio), Francisco Hernández (Las Gastrocrónicas), Antonio Fernández y Salvador Domínguez (Revista Pomarus) y Joaquín Reyes (Revista Gastrónomo).
El itinerario ofreció una inmersión sensorial en la esencia de la gastronomía local, con especial atención a elaboraciones artesanas y productos con denominación de origen. El arroz de Calasparra, los quesos de Murcia DOP y los vinos DOP Bullas fueron los protagonistas de una experiencia que permitió comprender su arraigo cultural y su proyección como motor económico sostenible.
La primera jornada comenzó con la llegada a Caravaca de la Cruz y la acogida en la Hospedería Nuestra Señora del Carmen, seguida de la visita al proyecto de rehabilitación y musealización de la Casa Museo de San Juan de la Cruz, un edificio cargado de historia vinculado al “Siglo de los Místicos”. Durante la cena en los jardines del Restaurante Casa Uribe, donde se ofreció una cuidada selección de productos locales, los participantes contaron con la presencia del alcalde de Caravaca de la Cruz, Juan Francisco García Fernández, quien subrayó el compromiso de la localidad con la promoción de su patrimonio y su gastronomía como motor de desarrollo rural. La jornada concluyó con un recorrido nocturno por el conjunto histórico iluminado para la ocasión.
Visita a Calasparra
El segundo día trasladó la experiencia a Calasparra, comenzando con una visita guiada a los arrozales del paraje de la Presa del Bayo. Allí, Sergio López, director técnico del Consejo Regulador de la D.O.P. Calasparra, explicó las técnicas de cultivo ancestral y sostenible que preservan el ecosistema del arroz de Calasparra DOP, generando un paisaje de gran valor ecológico y turístico.
La alcaldesa de Calasparra, Teresa García, acompañó a los asistentes, destacando la importancia del arrozal como símbolo de identidad local y recurso económico sostenible. Los campos dorados en plena época de siega ofrecieron una estampa que nada tuvo que envidiar a las icónicas imágenes de los arrozales de Vietnam, consolidando su atractivo como destino paisajístico y gastronómico.
Tras contemplar este entorno único, el grupo realizó un descenso en rafting por el río Segura, en la zona de la Escuela de Piragüismo de Calasparra, ofreciendo una perspectiva distinta del paisaje ribereño. A media mañana, la experiencia continuó con la visita a la Cueva del Puerto, donde un recorrido guiado por sus galerías perfectamente acondicionadas sumó el valor del patrimonio natural a la propuesta.
El momento más esperado para los amantes de la gastronomía llegó en el restaurante Santuario Virgen de la Esperanza, donde se celebró una presentación y cata maridaje de quesos y vinos con denominación de origen certificada. Eduardo Haba Nuevalos, del Consejo Regulador de Quesos de Murcia, y José Sánchez Alcaraz, Maestro del Vino de Bullas 2024 y sumiller del Museo del Vino de Bullas, guiaron a los asistentes en una degustación comentada que puso en valor el trabajo de los productores y la calidad diferenciada de ambos productos.
El cierre de la jornada fue un almuerzo con degustación de arroces típicos calasparreños, maridados con vinos de la DO Bullas, consolidando la idea de que la gastronomía es un elemento esencial para el desarrollo rural, la preservación de tradiciones y la atracción de turismo de calidad.
Esta iniciativa, impulsada por Integral, Sociedad para el Desarrollo Rural, en colaboración con los ayuntamientos de Caravaca de la Cruz y Calasparra, así como con los consejos reguladores implicados, reforzó la imagen de la Murcia Rural como un territorio rico en sabores auténticos, saber hacer tradicional y compromiso con la sostenibilidad.