El brillo de la gastronomía murciana se intensifica esta noche en Málaga, escenario de la gala anual de la Guía Roja, donde el restaurante Barahonda, dirigido por el chef Alejandro Ibañez y ubicado en Yecla, ha logrado su primera Estrella Michelin. Un reconocimiento largamente esperado que consolida al Altiplano como uno de los territorios gastronómicos más estimulantes del sureste español.
La noticia llega en el mejor momento del restaurante. Hace apenas unas semanas, Barahonda fue protagonista de una noche inolvidable al recibir dos galardones decisivos en una misma jornada: el premio a Mejor Restaurante Creativo en los Premios de la Gastronomía de la Región de Murcia, organizados por LA VERDAD, y la T de Oro 2025 de Tapas Magazine, otorgada en su IV edición celebrada en Madrid. Estos reconocimientos, uno regional y otro nacional, ya anunciaban que el proyecto vivía su etapa más sólida y brillante, consolidándolo entre las propuestas gastronómicas más relevantes del sureste por su cocina creativa, su sensibilidad hacia el territorio y su conexión natural con el vino.
El anuncio de la estrella, recibido entre aplausos en el auditorio malagueño, supone la consagración definitiva del trabajo liderado por el chef Alejandro Ibáñez y por un equipo que ha evolucionado con admirable coherencia. Su propuesta culinaria se sostiene en un discurso propio, profundamente ligado al paisaje y a los viñedos que rodean la bodega familiar, fuente de inspiración de sus menús degustación.
En sala, el restaurante ha obtenido también un notable reconocimiento por una experiencia cuidada al detalle, un ritmo de servicio sereno y una atmósfera que potencia la conexión entre cocina y territorio. La combinación de ambos mundos —vino y gastronomía— ha permitido a Barahonda construir una identidad única que hoy encuentra en la Estrella Michelin la confirmación más prestigiosa.
La distinción supone un hito histórico para Yecla, que hasta ahora no contaba con ningún restaurante reconocido con estrella, y suma un nuevo referente al mapa gastronómico de la Región de Murcia, cada vez más presente en los grandes escenarios culinarios nacionales.
Con este reconocimiento, Barahonda abre una etapa ilusionante y de mayor visibilidad, con la responsabilidad de mantener el nivel que le ha llevado hasta aquí y la libertad creativa que siempre ha caracterizado su cocina. Hoy Yecla brilla más que nunca, iluminada por su primera estrella Michelin.
